Esta labor de manejo de cultivos consiste en trasladar una planta de 3 – 4 semanas de vida desde su germinación a otro lugar diferente de donde se sembró inicialmente con el propósito de que pueda desarrollarse y crecer sin ningún problema de espacio y competencia. Por lo general esta actividad está limitada a un grupo de hortalizas y frutales, capaces de soportar el estrés ocasionado por la ruptura de raíces y hojas; entre las hortalizas sobresalen las coles, lechugas, betarragas, apios, tomates, ajíes, hierbas aromáticas, etc. Existe un grupo de hortalizas que poseen raíces delicadas a la ruptura y no soportan el trasplante como el rabanito, espinaca, culantro, zanahoria, etc.
Para que el trasplante sea efectivo y la planta pueda prender se debe considerar la edad de la planta, siendo recomendado realizarla entre los 3 – 4 semanas de vida que es cuando llega a desarrollar 4 hojas verdaderas (hojas con la forma característica del cultivo); si se realiza después de este periodo habrá un mayor daño de raíces pues éstas empezaran a enredarse entre sí, además, a mayor cantidad de hojas la planta necesitará absorber mayor cantidad de agua para mantenerlas y no para adaptarse al trasplante ocasionando que se marchite y muera.
Existen dos tipos de trasplante, los cuales se diferencian por la presencia de sustrato en la zona radicular estos son:
A raíz desnuda: Como su nombre lo dice las plantas se extraen y se siembran sin el sustrato original del cultivo que proteja a las raíces por lo que ocasiona mayor dificultad al tener que extraerlas del suelo, separarlas de las demás, desenredarlas y trasplantarlas; además hay mayor probabilidad de mortandad, sobre todo si se realiza durante el verano.
Con sustrato: Aquí las plantas son conocidas como plantines, estas son sembradas en bandejas especiales que permiten su fácil extracción con todo y sustrato; la ventaja que presentan es la reducción del daño a raíces y un rápido prendimiento de las plantas, entre ella se puede cultivar plantas que originalmente no soportarían el trasplante; sin embargo, el elevado de instalación costo reduce su desarrollo.
Plantín de ají
Actividades
En esta entrada se describirá los pasos para el trasplante a raíz desnuda pues es el que requiere de mayores cuidados para su adecuada realización.
1.- Extracción de plantas:Se realiza con cuidado de no quebrar los tallos y de evitar dañar las raíces más gruesas; para su fácil desarrollo es recomendable regar abundantemente para que el suelo esté más suave. Luego de la extracción es recomendable recortar la mitad de cada hoja para reducir la transpiración de la planta y favorecer su prendimiento.
2.- Preparación del suelo:El suelo debe de removerse de modo que esté suelto y permita la absorción del agua de riego.
3.- Riego previo:
Previo al trasplante se debe regar abundantemente para que las raíces de las plantas se puedan adherir al suelo con facilidad.
4.- Trasplante:
Se cava un pequeño agujero y se coloca la planta de modo que las raíces queden lo más cerca posible de la zona de riego (parte inferior de los surcos), luego se procede a tapar las raíces y a realizar una ligera presión al contorno de las raíces para que no quede ningún espacio libre entre el suelo y las raíces.
5.- Riego posterior:Se realiza alrededor de las plantas para sellar el suelo y evitar que pierda humedad rápidamente.
Luego de todas estas labores se debe esperar que la planta prenda y continúe su crecimiento, el brotamiento de nuevas hojas debe empezar a los 3 – 4 días; si hubo un daño al tallo o raíces se observará una marchitez de toda la planta.
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